Día 4. Una película que explota tu peor miedo

No le tengo miedo a muchas de las cosas habituales: la muerte, la soledad, el repudio social… pero en cambio temo irremediablemente al dolor, y es lo que explota el personaje demoniaco Daryl Van Horne (¿quién lo habría podido interpretar mejor que Jack Nicholson?) en la más hermosa bruja: Sukie (interpretada por Michelle Pfeiffer) en la divertidísima Las brujas de Eastwick (The Witches of Eastwick), dirigida por George Miller en 1987.

Sin ser una obra maestra del séptimo arte, esta entretenida película logró que me identificara totalmente con el tema, ese deseo del hombre perfecto, esas ganas de manipular los elementos al antojo, de complacer todos los deseos… pero las represalias del demonio cuando no se lo complace resultan tan aterradoras que no pude dejar de sufrir con Sukie cuando Nicholson usa la magia negra para inflingirle dolor físico, el mayor de mis temores.