Día 88. Una película que no te gusta y a todos tus amigos les parece la mejor

Como ya habrán notado, soy pasional. Así que igual que hay películas que amo con el alma, hay otras que detesto con todas mis fuerzas. Una de ellas, que no soporto, salvo por su excelente banda sonora -eso lo admito- es la detestable Forrest Gump. 

La cinta de Robert Zemeckis me resulta facilista, melodramática, tonta… ¡Y no entiendo cómo a todo el mundo le encanta! La calificación que tiene en IMDb es altísima, muchos de mis conocidos y mis estudiantes suelen adorarla, y yo me muerdo los labios para no despotricar de ella cuando no corresponde. Lo peor de todo es que la vi hace tanto tiempo que mis argumentos están anquilosados, ya no sé de qué agarrarme para sostener seriamente lo mala que me parece. Convertir en heroico a un personaje con retraso mental, por leve que sea -gracias a las circunstancias y a la música incidental, realmente-, no veo qué tiene de interesante. Y la manera de contarlo trata de cierta manera al público también de tonto, le da todo mascado, todo lo explica, lo muestra, lo explicita.

¿Y qué tal la frasesita famosa: «La vida es como una caja de chocolates, nunca sabes cuál te va a tocar»?, habrase visto un refrán más bobo, sin el menor sentido retórico esperado, sin que aporte un significado adicional verdadero a la historia. El acento de Tom Hanks -y en general su caracterización melosa- tampoco lo soporto, me resulta en exceso sobreactuado. En fin, como dije antes, lo único rescatable, para mí, del filme, es la banda sonora.

Igual, los dejo con el tráiler, y quedo a la espera de todos sus reproches.